Una de las mejores maneras de hacer flan, es infusionar un poco de leche (medio litro) con un poquito de canela y una cáscara de limón o naranja. Cuando la leche haya hervido, retírala. Puedes agregar un poquito de extracto de vainilla.
Después, deja enfriar la leche. El siguiente paso será añadir 4 huevos batidos a la leche ya tibia o fría y azúcar al gusto (entre una taza o taza y media). Mete esta mezcla en unos moldes de flan que previamente habrás caramelizado y después hornea al Baño María, al menos 25-35 minutos.
Desmolda y decora con una guinda, aunque si lo prefieres, siempre puedes colocarle más caramelo líquido encima. Recuerda hacer doble cantidad por si lo necesitas. Este flan casero es especial para servirlo con un poco de frutas o incluso con nata líquida, siendo un postre genial para todos. Siempre te sorprenderá el hecho de comer postres caseros, con un mejor sabor siempre.